A dos puntas en Antropología
Sobre la participación interclaustros de
Caracol Insurgente -La Juntada en Antropología-
en el conflicto de las rentas.
Caracol Insurgente -La Juntada en Antropología-
en el conflicto de las rentas.
El
primer cuatrimestre de este año en nuestra carrera estuvo atravesado
por varios procesos -más o menos conflictivos- entre los que figuran: el
demorado reinicio de las actividades para la reforma del plan de
estudios, los horarios marcianos de cursada, los conocidos problemas en
las condiciones edilicias, las demoras para finalizar el trámite del
título, el incumplimiento de la resolución del Consejo Directivo que
limita la bibliografía en lengua extranjera, la eterna discusión sobre
una cátedra alternativa de Metodología y en el medio de todo eso
discusiones sobre Antropología y Gestión, Ética, Democratización,
Compromiso.
Salta
a la vista que es un año movidito. Dentro de este repertorio (que te da
para elegir) el pico de las tensiones sin dudas se lo llevó el conflicto de las rentas.
En este cuatrimestre se discutió, y con ganas, sobre los criterios de
asignación de rentas, sobre si esos criterios habían sido respetados o
no en asignaciones hechas, sobre si había que modificar lo actuado en
esas asignaciones o no, etc. Los casos más trascendentes fueron dos: por
un lado, el paquete de cuatro rentas asignadas por el departamento sin
pasar por la junta y con criterios no del todo claros (ver informe acá,
punto 3); por otro lado, el caso de la renta asignada para un registro
de aspirantes de la cátedra de Tiscornia (Sistemática 1), lo que
implicaba que un docente nuevo iba a ingresar con renta, pasando por
alto un listado de ad honorems que se compone de más de 40 compañeros y
compañeras, algunxs de ellxs trabajando gratis desde hace 6 años (ver
informe de la junta en la que se resolvió esto acá, punto 3).
En el medio de este conflicto, creemos, hubo dos logros muy significativos. Por un lado, la Junta Departamental decidió echar atrás la renta que en forma ilegítima se había asignado para ese registro de aspirantes (Tiscornia) y se resolvió, como debería haber pasado desde el principio, que se destine al listado de ad honorems, a la persona que hace más tiempo venía trabajando en forma gratuita. Esto tuvo que ver con un accionar doble que desplegamos desde La Juntada. Por un lado, presentar un proyecto en la junta departamental, para que esta modifique lo actuado previamente. Esto lo hicimos a través de nuestras representantes estudiantiles (Caracol Insurgente, mayoría en la Junta). Pero acompañando esto, tuvimos que discutir este proyecto en las reuniones del claustro de graduados, donde compañerxs nuestrxs están empezando a participar, y sostuvieron allí que había que apoyar este proyecto. Finalmente, tras las discusiones necesarias, los miembros de la Lista Confluencia -representación del claustro de graduados en la Junta- acordaron con nuestro criterio y terminaron apoyando nuestro proyecto (ver informe acá) presentado en la Junta como mayoría estudiantil.
Lo mismo sucedió en relación al otro logro al que hacemos referencia: se están acordando los criterios para asignar las rentas, en una comisión interclaustros y abierta que ya ha tenido dos reuniones y tiene convocada una tercera para el 26 de junio, con un buen nivel de consenso. La necesidad de discutir estos criterios venía flotando un poco el clima político de nuestra carrera desde principio del año, así lo plantearon lxs representantes del claustro de graduados en la primera Junta del año. Pero esto se catalizó alrededor de los dos casos mencionados (las cuatro rentas que no pasaron por la junta y la del registro de aspirantes de la cátedra Tiscornia), acelerando los procesos y, sobre todo, modificando fuertemente los criterios. Aquí también, desde La Juntada participamos en forma interclaustros (en las asambleas de estudiantes, reuniones de graduados, en la Junta y en la mencionada comisión), acompañando el reclamos de lxs docentes ad honorem: que se reglamente la asignación de rentas, que se priorice la antigüedad por sobre cualquier otro criterio, que se confeccione un listado de estxs docentes ordenado por antigüedad (es decir, que se sepa a quien le va a tocar una renta) y que este listado sea público.
Caracol Insurgente, la agrupación de La Juntada en la carrera de Antropología, existe hace ya más de 4 años. Viene de un mandato en la Junta y está cumpliendo el segundo, en ambos casos obteniendo la mayoría de la representación estudiantil. En ese tiempo, lógicamente, algunos de lxs compañerxs de nuestra agrupación se fueron graduando y hemos construido vínculos con otrxs compañerxs del claustro de graduados que no pertenecen a La Juntada. Desde el comienzo de este año hemos venido participando política y gremialmente de las instancias de los dos claustros y confiamos en poder continuar en esta misma línea. No hacemos esto sólo porque “tenemos la gente para hacerlo”, sino porque -y por sobre todas las cosas- estamos convencidxs de que va a ser un nuevo y válido terreno para seguir dando la pelea por transformar nuestra Universidad.
La suerte del principiante no puede fallar
Caracol Insurgente
Agrupación de estudiantes y graduadxs
La Juntada en Antropología
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