Reunidos en Asamblea el miércoles pasado (4 de mayo), estudiantes de antropología de las orientaciones social y arqueológica discutimos principalmente en torno a la reforma de plan de estudios. Desde Caracol Insurgente – La Juntada en Antropo, les acercamos esta modesta síntesis para continuar con la irreductible voluntad de que todos estemos al tanto, y (…al menos hacer lo posible para…) que nadie se quede afuera.
Para empezar queremos dedicar un par de líneas para recordar en dónde estamos parados. Desde principio de año retomamos el proceso con miras a discutir este cuatrimestre el futuro Tronco Común de la carrera. Los puntos en discusión son dos, o más bien los espacios en discusión: los contenidos del eje histórico y de la segunda materia de arqueología. Estos dos puntos vienen llevando una discusión en simultáneo, y precisamente de eso parlamos el miércoles pasado.
Arrancamos con un informe de un compañero que participó en la reunión interclaustro de arqueología, previa a la asamblea general de antropo. La “interclaustros de arqueología” se constituyó el año pasado con el fin de resolver la propuesta de eje epistemólogico – metodológico, que se acordó en las últimas jornadas para la orientación sociocultural pero no para la de arqueología. Desde ese momento y como resultado de la necesidad de ir configurando una segunda materia de arqueología para el tronco común este espacio se constituyó como el lugar de discusión de esta segunda materia, del que salen las propuestas para que los demás refrenden.
En la reunión de la interclaustros de arqueología del último miércoles se trabajó para conciliar la propuesta presentada en la comisión logística con las críticas que se plantearon allí (especialmente del claustro de profesores de sociocultural) y la contrapropuesta de bajar Arqueología Argentina al tronco común. Como resultado de esto en la interclaustros de arqueología se delineó una propuesta de arqueología americana para el tronco común, que tomara desde el poblamiento de América hasta la conquista y se fueran dando diferentes ejes problemáticos (poblamiento, desarrollos culturales, etc.) desde diferentes concepciones teóricas. La resolución de esta discusión fue armar una comisión para elaborar una síntesis de esta nueva propuesta. Esta redacción se compondrá de fundamentación y contenidos mínimos, y se va a tratar en la próxima comisión logística (este jueves a las 18 en el departamento)
Esta propuesta se presentó en la asamblea de estudiantes, donde fue presentada por compañeros que habían estado en la interclaustros de arqueología. La idea de pasar de una arqueología a una americana fue compartida por quienes estabamos en la asamblea, ya que consideramos que el argumento planteado (de que pensar en fronteras en esa cronología es un acto de ficción) era sólido y valido. Hubo una tensión que se planteó en la interclaustos de arqueología y que la tratamos de nuevo en la asamblea: ¿organizar esta segunda materia desde el desarrollo disciplinar de la arqueología o de ejes problemáticos que tengan que ver con los procesos que se dieron en el territorio americano?
En esta discusión, que fue la más importante, la posición de la asamblea fue fomentar que los contenidos se organicen alrededor de los procesos pensados como ejes problemáticos y no alrededor de la historia disciplinar. Esto no quiere decir que sea una materia de casos o meramente casuística (la palabra de moda en la reforma del plan) sino que se plantea también discusiones teóricas y políticas, pero organiza los contenidos alrededor de procesos sociales.
Dos comentarios finales sobre esta propuesta, tal como se viene delineando al día de hoy. En primer lugar, consideramos en la asamblea que esta propuesta de arqueología americana, organizada alrededor de los procesos sociales, es más adecuada para pensar una materia del tronco común. En segunda instancia, es de destacar que si esta materia pudiera acercarse al momento de la conquista encuadraría con los contenidos que se están pensando para el eje histórico, cumpliendo así uno de los planteos históricos de nuestro claustro para esta reforma (pensar la reforma integralmente y en recorridos organizados).
Resuelta esta posición discutimos sobre el eje histórico. Volvimos a ver las cuestiones planteadas después de lo que se charló en la ultima Comisión Logística (sugerimos para los/as interesados/as que chusmeen el informe de dicha reunión que difundimos en el “Boletín Insurgente Nº3”). Como resultado de esa reunión quedaron dos temas a tratar: por un lado, delinear que entienden los otros claustros por una “perspectiva antropológica” y resolver cual es nuestra posición ante ese planteo; y, por otro lado, acordar una estrategia para que se incluyan en el futuro plan los contenidos de historia contemporánea que estamos reclamando.
El tema de la perspectiva antropológica es que los otros claustros nos plantearon que ese era un item a incluir en los contenidos mínimos del eje histórico. Es decir, que el eje sea de contenido histórico, pero que se vea desde una perspectiva disciplinar que nos sea propia y que como resultado sean contenidos que brinden más herramientas a los estudiantes. Nosotros en la asamblea planteamos ser precavidos con esto y observar con precaución que se implica por “perspectiva antropológica”, de manera tal que signifique si herramientas de análisis propios, pero que no se traduzca en una materia incompleta en términos del desarrollo regional de América latina por rechazar contenidos que son “de historiador”.
La cuestión de los contenidos de historia contemporánea quedó en la asamblea asociada a la propuesta de estructura que vamos a hacer para el tronco común. Las jornadas ya están cerca (fines de mayo, seguramente este jueves se establecerá una fecha precisa) y desde estudiantes creemos que la metodología de llegar a las jornadas con una única propuesta que refrendar es lo que nos ha permitido avanzar hasta aquí. En función de esto, planteamos que ya es momento de ir delineando la propuesta que queremos acordar con los otros claustros.
La propuesta que conversamos en la asamblea y que acordamos elevar a la comisión logística, es un tronco común de 10 materias que detallamos a continuación, pero a condición -y esto es muy importante- de que los diferentes claustros de ambas orientaciones nos comprometamos a incluir los contenidos de historia contemporánea en el tronco común o en la orientación sociocultural si es que concluimos que estos contenidos no serían relevantes para la orientación arqueológica. La estructura del tronco común, en función de estos argumentos, sería la siguiente:
- Problemáticas de antropología social y política (ex Sistemática I)
- Problemáticas de antropología económica (ex Sistemática II)
- Problemáticas de antropología simbólica (ex Sistemática III)
- Antropología biológica y paleoantropología
- Fundamentos de Arqueología (ex Fundamentos de Prehistoria)
- Segunda materia “arqueológica”
- Epistemología de las ciencias sociales (actualmente en la orientación sociocultural)
- Materia histórica
- Historia de la teoría antropológica y arqueológica I
- Historia de la teoría antropológica y arqueológica II
Esta propuesta se sostiene en una caracterización sobre las propuestas existentes al día de hoy (hay tres propuestas en danza: de 9, 10 y 11 materias). En este contexto, creemos que un tronco común de 10 materias de las características mencionadas respeta los planteos de los estudiantes pero al mismo tiempo fomenta el acuerdo con los otros claustros. Por supuesto, que para que esto llegue a buen puerto los demás claustros deberán también hacer concesiones. Los graduados de sociocultural tendrían que hacer concesiones sobre los contenidos de historia contemporánea y los claustros de arqueología sobre la inclusión de una segunda materia de historia de la teoría en el tronco común.
Próximas fechas importantes:
Próxima asamblea: jueves 19/05, a las 19 hs, en el hall del tercer piso.
Comisión logística en el departamento: jueves 12/05 a las 18 hs.
caracolinsurgente@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario